Se acercan las elecciones europeas y desgraciadamente
todavía no puedo votar aunque, pensándolo bien, no sabría a quién votar, no lo
tengo nada seguro. Por supuesto si pudiera, lo haría ya que el derecho a votar
es un derecho que a las personas, y más todavía a las mujeres, nos ha costado
mucho obtener. Pero para poder hacerlo necesitaría estudiar largo y tendido las
diferentes opciones y ofertas que ofrecen los distintos partidos. Tal y como
están las cosas ahora con la crisis, el paro, la pobreza, desahucios y sobre
todo la corrupción política y la pérdida de derechos. Sobre estos dos últimos
puntos me gustaría hablar. El primer tema del que me gustaría hablar es de la
corrupción política. En estos tiempos que corren ya nadie sabe de quién fiarse y
eso lleva a dudar a quien votar ya que no sabes si el partido al que votaras será
bueno o no tendrá las cualidades que esperabas. Por otro lado tenemos el tema
de los derechos. En mi opinión se ha luchado mucho por una serie de derechos
que ahora están siendo desestimados. Esto lleva a pensar que igual el partido
que elegimos no es como nosotros pensamos y nos lleva a dudar. Teniendo todo
esto en cuenta la verdad no sabría qué partido elegir para que nos represente
en Europa, es una decisión difícil y te rebanas los sesos pensando cual será lo
mejor para todos y que tu voto puede influir en lo que ocurra en Europa. Sea
como sea votaría aunque me llevara mucho tiempo pensarlo, ahora, una cosa sí
que la tengo muy clara, no votaría a un partido de derechas.